En Córdoba tienen en el padrón de salud 500 trabajadoras y trabajadores sexuales dado de alta en la Coordinación de Salud Municipal.
De las cuales, llevan un control sanitario y que en caso de registrar positivo a alguna enfermedad, les suspenden el tarjetón de servicio en lo que reciben tratamiento médico para su recuperación.
La titular de Salud Municipal del Ayuntamiento de Córdoba, Adriana Arteaga informó que el año pasado dos sexoservidoras fueron detectadas con enfermedades de transmisión sexual y que tuvieron que retenerles el tarjetón para evitar el contagio entre las personas que acuden a este tipo de servicios.
Sin embargo, les invitan a las trabajadoras sexuales a hacer uso de los métodos de planificación como el condón interno y externo para evitar exponerse y contagiar a terceras personas en su ejercicio de su actividad.